- Su discurso se concentró en la idea del enemigo externo
- Eludió hablas de temas como la migración de venezolanos que hoy representa al 12 % de la población nacional, según cifras de la OIM
- Tampoco asomó en su discurso que 7 de cada 10 hogares monitoreados por Cáritas Venezuela ha incurrido en alguna forma de privación alimentaria
El pasado viernes 27 de septiembre la Vicepresidente Delcy Rodríguez participó en la última sesión de debates en la septuagésima cuarta Asamblea General de la ONU. Rodriguez se presentó el mismo día que los cancilleres de Rusia y China. Su discurso, de una inusual corta duración (unos 30 minutos) se concentró en la idea del enemigo externo y el ataque constante del “hegemon del mundo” hacia Venezuela. Rodriguez enumeró las medidas coercitivas unilaterales asegurando que eran más de 350 sanciones que afectan la capacidad del estado venezolano.
La oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC, por sus siglas en inglés) especifica en su sitio web 150 entidades sancionadas, entre personas y compañías. Sin embargo, la lista se hace más grande cuando se toman en cuenta otras empresas condicionadas a hacer negocios con el gobierno venezolano, a través de 8 órdenes ejecutivas de la administración Obama y Trump. En total, el gobierno de los estados unidos ha sancionado a 150 individuos y empresas y recovado más de 718 visas, de acuerdo con una nota de AP.
En su alocución, la vicepresidenta Delcy Rodriguez hizo mención al efecto que tienen las sanciones sobre la capacidad de generar disponibilidad de divisas para el estado venezolano, asegurando que las sanciones representan un “Bloqueo financiero total”. Sin embargo, el equipo de Cotejo.info verifico en noviembre del 2018 que la industria farmacéutica venezolana acumula ya cinco años de una caída sostenida que inició mucho antes de las primeras sanciones impuestas a funcionarios venezolanos. El deterioro no es exclusivo de la industria farmacéutica, la infraestructura hospitalaria también sufre por el masivo éxodo de doctores, enfermeras y la escasez de medicamentos e insumos básicos.
Además, las sanciones que han implementado los Estados Unidos, la Unión Europea y el Grupo de Lima excluyen la compra de alimentos y medicinas, aunque si hacen más difícil la adquisición de alimentos del CLAP a través de empresas sancionadas.
Ni una palabra sobre la migración
En el discurso, lleno de referencias a la administración de Donald Trump y acusaciones a grupos paramilitares colombianos, la otrora canciller de la república aseguro que el Estado venezolano genera un sistema de bienestar que atiende a 19 millones de venezolanos. No hizo comentario alguno sobre lo que es conocido como uno de los flujos migratorios más grande de América Latina. Según la plataforma de coordinación para refugiados y migrantes venezolanos de la OIM, son 4 millones 307 mil personas que han salido del país: El 12% de la población.
Delcy Rodríguez no dudo en denunciar al mundo los niveles de desigualdad en los países del Grupo de Lima, asegurando que tenían niveles abismales de subdesarrollo. Sin embargo, la actual vicepresidente no hizo mención alguna de la cruda crisis de accesos de alimentos, que es tan pronunciada que la FAO incluyó a Venezuela en la lista de países que monitorea de forma constante, e incluso generó un plan para atender a la totalidad de la población del país y hace énfasis en la cantidad de migrantes.
De igual forma, y haciendo un monitoreo desde 14 estados del país, Caritas de Venezuela, el brazo de caridad y asistencia de la iglesia católica, realiza constantemente el boletín de Monitoreo del Estado Nutricional y la Seguridad Alimentaria Familiar Niños Menores de 5 años.
El último boletín, de fecha marzo de 2019 asegura que en 5 de cada 10 niños encuestados presenta algún nivel de deterioro nutricional. En 3 de los 14 estados evaluados, la desnutrición alcanza niveles de emergencia, siendo el más grave el estado Sucre. Otros 5 estados están en crisis alimentaria. El informe también narra parte de la realidad de los venezolanos cuando asegura que la disponibilidad de los alimentos ha incrementado notoriamente, pero su acceso se ha dificultado; una familia necesita 21 salarios mínimos para cubrir la canasta alimentaria. El boletín también menciona una cifra que no se asomó en el discurso de Delcy Rodríguez: 7 de cada 10 hogares monitoreados ha incurrido en alguna forma de privación alimentaria. El equipo de Cotejo, califico de falsa la declaración de Nicolás Maduro al de decir que el estado garantizaba el alimento al pueblo venezolano.
Bajo la sombra del informe Bachelet
A pesar de la intensa cobertura del sistema de medios públicos al informe elaborada por la oficina del Alto Comisionado de los Derechos Humanos, Delcy Rodriguez no hizo mención del documento escrito por la ex presidente chilena Michelle Bachelet. En el informe se explica de forma tajante que a pesar que las medidas coercitivas unilaterales pueden agravar la crisis, esta le precedía, así como confirmó el mismo Banco Central de Venezuela al hacer públicos sus datos después de años de oscurantismo institucional.
Sobre la dimensión de la crisis, el informe explica que ¨el nivel de asistencia es mínimo en relación a la magnitud de la crisis y hay una necesidad urgente de adoptar reformas económicas estructurales¨. De igual forma la Alta Comisionada de Derechos Humanos recomendó garantizar “que todos los programas sociales se implementen de manera transparente, no politizada y no discriminatoria, con la aplicación de medidas eficaces de supervisión y rendición de cuentas” a propósito de la politización de programas como el CLAP y el carnet de la patria que es “manejado por las estructuras locales del partido oficial, que monitorean la actividad política de las personas beneficiarias”.
Marianela Palacios, directora editorial de Cotejo.info, escribió en marzo de este año “Bachelet: 7 verdades sobre Venezuela retumban en Naciones Unidas” donde explica que “La expresidenta de Chile alertó en Ginebra sobre graves violaciones de derechos humanos que sufren los venezolanos y que el gobierno insiste en negar” como hizo Delcy Rodriguez en la ONU.
Con sus grandes ausentes, críticas al imperialismo americano y constantes notas sobre el gobierno colombiano, el discurso de la vicepresidente se centró en la idea del enemigo externo, eludiendo toda responsabilidad como representante de un gobierno que administra el país con la inflación más alta del mundo y la crisis de migrantes más grande del continente.
Daniel Acosta para Cotejo.info