- Los reportes de OPEP aclaran con cifras oficiales de Venezuela que el volumen de incremento es menor que el anunciado por el gobierno
- Las cifras anuales son negativas y, en cambio, describen una tendencia a la caída en el suministro del petróleo venezolano
Nicolás Maduro ofreció un discurso, como una suerte de balance de “logros” de su gestión 2019, ante los más de 500 integrantes de la oficialista Asamblea Nacional Constituyente de Venezuela el 14 de enero de este año y afirmó que hubo un “tímido” incremento de producción petrolera. Poco después, la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) lo desmintió citando cifras suministradas por fuentes oficiales.
La Constitución venezolana, en su artículo 237, prevé que dentro de los diez primeros días siguientes a la instalación de la Asamblea Nacional, el Presidente de la República presente un mensaje para dar cuenta de aspectos políticos, económicos, sociales y administrativos de su gestión durante el año inmediatamente anterior. No nos ocupan las formas, dignas de otro contraste, sino el recado que alude al recurso del que depende la monoproductora exportación que sostiene la economía del país suramericano.
En su comparecencia, quien actúa como jefe de estado, afirmó que, a pesar del bloqueo económico y financiero del gobierno de Estados Unidos, Venezuela logró “avanzar tímidamente, pero significativamente (sic) en la recuperación de la producción petrolera. Desde el cierre de septiembre de 2019 hasta la fecha, se produjeron más de 230 mil barriles adicionales que nos colocan el horizonte de 1 millón de barriles”, dijo textualmente, según reporta el sitio web Venezolana de Televisión.
Aumentó “tímidamente” el último trimestre, pero bajó producción anual según OPEP
Las cifras que difunde la OPEP las recibe de la administración de Nicolás Maduro y muestran una caída en la producción de 604.000 barriles diarios de petróleo en 2019, lo que contrasta con el discurso ante los constituyentes en el que aseguró la «tímida» alza de 230.000 barriles por día en el recién terminado año.
Aunque la tendencia al alza en las cifras de suministro de crudo en el cuarto trimestre de 2019 es cierta y los coloca por encima de los 900 mil barriles diarios para el cierre del año que justo terminó, el incremento no es de 230 mil sino de 158 mil bdp con respecto al trimestre anterior. Otra tarea es confirmar si se trata de aumento real de la producción o si, en cambio, la variación es resultado de la liberación de inventarios hasta ahora estancados producto de las dificultades de Venezuela para comercializar internacionalmente el producto.
De acuerdo con el reporte OPEP, las cifras de PDVSA muestran que nuestro país finalizó diciembre de 2019 en 907.000 barriles/día, mientras que en diciembre de 2018 fueron 1 millón 511 mil, lo que representa una baja de 40 %.
El diario Tal Cual, sin más rodeo, apunta causas de la disminución: “cuando Maduro asumió el poder se inició el desplome de las exportaciones petroleras. La falta de inversión en la industria para el mantenimiento de las refinerías, la renuncia de personal calificado, el cierre de pozos petroleros y las sanciones norteamericanas a la empresa estatal, han llevado la producción a mínimos históricos”.
Promesa 2020 cuesta arriba
Maduro, además, lanzó una promesa/solicitud de ayuda: elevar durante el año 2020 la producción petrolera a 2 millones de barriles diarios, como mínimo. “Pido a la clase obrera petrolera su apoyo para que Venezuela recupere su capacidad productiva en toda la industria y coloquemos esas riquezas al servicio del pueblo”, dijo en el hemiciclo que la ANC comparte con la Asamblea Nacional.
En diciembre, según los datos que aportó el Ministerio de Petróleo a la OPEP, el suministro de diciembre de 2019 fue de 907 mil barriles por día, ni siquiera el millón. Luce difícil que al finalizar 2020 la industria del hidrocarburo alcance la promesa de 2 millones que hizo Maduro. Sería cuestión tangible, de infraestructura de la industria, más que del temperamento “tímido” de los barriles que no tienen la osadía de subir o que el declarante cuide la correspondencia entre su discurso y los números que su administración entrega a la petrolera mundial.
En todo caso, las cifras históricas oficiales referidas por la OPEP indican que, en general, la caída ha sido sostenida en los últimos tres años, con disminuciones de suministro por el orden de los 497 mil bdp entre 2018 y 2019, y de 519 mil bdp entre 2017 y 2018. Igual descenso se puede apreciar si se comparan los mismos periodos parciales (trimestrales) de cada año.