- La difusión sobre el cronograma y alcance de este plan ha sido deficiente
- Sitio web de Universidad en Casa no posee información detallada del plan
- 54 % de los venezolanos tiene apagones todos los días, según Observatorio de Servicios Públicos; 53,1 % no tiene internet
- Velocidad de la conexión a internet en Venezuela es de las más bajas del mundo
- No todos los estudiantes y profesores tienen computador, internet o teléfonos inteligentes
La pandemia generada por la COVID-19 ha causado estragos en todos los sectores del mundo. 15 millones de contagios, más de 600 mil muertes, una debacle económica global, además de un cambio radical de paradigma en cuanto a la forma de vivir respecto a las rutinas de la humanidad hasta hace muy poco.
Venezuela no es la excepción. A pesar de que el número de contagios es, de acuerdo con fuentes oficiales, considerablemente más bajo que sus pares de la región, la fragilidad en el sistema de salud público, las constantes fallas en servicios básicos y vitales tales como electricidad y agua configuran un escenario más que sombrío.
Oficialismo lanza plan Universidad en Casa
En ese contexto, el sector oficial anunció el lanzamiento del plan Universidad en Casa. La idea de este programa es, básicamente, aprovechar las bondades que brinda la tecnología para que los cursantes de educación superior continúen con sus estudios en medio del confinamiento ocasionado por el coronavirus.
El ministro del Poder Popular para la Educación Universitaria (MPPEU) -designado por Nicolás Maduro-, César Trómpiz, dijo en un programa transmitido por Venezolana de Televisión que 90 % de las universidades se sumó al plan Universidad en Casa.
“Noventa por ciento de las universidades ha respondido de manera positiva al plan Universidad en Casa, han establecido su metodología y su planificación en consejos universitarios. Además han restablecido la comunicación a distancia con sus estudiantes”, dijo.
También hablo de 67 % del estudiantado que se habría sumado a este programa.
En reiteradas ocasiones, Trómpiz ha dicho que los canales más utilizados por docentes y alumnos para mantener el contacto durante la pandemia son WhatsApp y el correo electrónico, sin tener en cuenta que no todos los estudiantes –e incluso docentes- tienen un smartphone que les permita manejar la app de mensajería o un computador con conexión estable a internet para revisar constantemente el email.
¿Un plan bien difundido?
El Observatorio de Universidades (OBU) es una organización que hace seguimiento al tema universitario en el país, con énfasis en el estado Lara. Llevan varios estudios, entre ellos una base de datos con los posts del ministro de Educación Universitaria y del MPPEU en las redes sociales Twitter e Instagram, los temas que abordan y la frecuencia de posteos entre los meses de abril y junio.
De los 56 tuits/posts en abril, 18 (32,1 %) versaron sobre el plan “Educación en Casa”. Cinco de esos 18 fueron videos en Instagram con “técnicas de estudio”, mientras que dos eran “clases virtuales”. Solo dos (11,1 %) abordaron lineamientos sobre el plan.
El quinto mes de 2020 registró un mayor número de trinos y posteos, pero menos referencias al plan. Fueron 14 de 68, lo que representó 20,6 %. Ninguno dio detalles o aclaró dudas sobre su ejecución. En tres de esos 14 contenidos (21,4 %) se mostraron videoconferencias con autoridades de institutos de educación superior. También se anunció la creación del sitio web de Universidad en Casa. De ello hablaremos más adelante.
En junio, 37,5 % (15 de 40) de los contenidos en Twitter e Instagram tuvo que ver con el plan Universidad en Casa. Muestran resultados, reflexiones, jornadas, conversatorios, videos, entre otros.
Una de las cosas que revela la base de datos de OBU es la falta de una intención clara por parte del sector oficial de informar el alcance y pasos a seguir para una ejecución exitosa del programa. Si vamos más allá, al 21 de julio la dirección de Twitter del ministro Trómpiz está suspendida por incumplir las reglas de la red social. En otras palabras, los estudiantes y profesores tienen un canal de difusión menos para consultar sus inquietudes sobre Universidad en Casa.
El sitio web del plan Universidad en Casa
El 23 de mayo, el perfil de Instagram del MPPEU publicó un video en el cual Trómpiz anunciaba que Universidad en Casa tenía sitio web.
“Ahora contamos con un espacio virtual colaborativo -de los procesos de aprendizaje entre universidades- para que las instituciones de educación universitaria divulguen sus experiencias académicas”, reveló.
También dijo que el site tenía una caja de herramientas “para el manejo de experiencias propias de cada casa de estudios” y un calendario de eventos.
El OBU realizó seguimiento al pronunciamiento de Trómpiz y accedió al sitio web –no seguro- http://universidadencasa.educacionuniversitaria.gob.ve. Encontró que en la misma se ofrecen boletines informativos, videotutoriales para el uso de tecnologías y enlaces a repositorios de materiales, además de una sección llamada “Caja de Herramientas” con recursos varios. El problema es que, según el observatorio radicado en el estado Lara, ninguno abre.
Cotejo.info también ingresó y encontró que el site fue objeto de un refrescamiento por un par de días. En ese instante mostraba un diccionario de ocho áreas de conocimiento y un buscador de programas académicos e instituciones de educación universitaria por estado, municipio y parroquia. No aparecían los recursos y repositorios mencionados en el párrafo anterior. Seguía sin ser seguro, y lo más importante, no contaba con información detallada sobre el plan o programa Universidad en Casa. Ya volvió a su interfaz original.
¿Y los sitios web de las universidades del país?
De acuerdo con el OBU, la extensión del dominio .edu.ve se mantiene en muy pocas de las universidades nacionales sin que Cantv, empresa estatal de telecom y principal proveedora de internet en Venezuela, dé explicaciones al respecto.
Son pocas las casas de estudio superior públicas del país que mantienen presencia en la red de redes, como la Universidad Central de Venezuela y la Universidad de Carabobo. Otras, como La Universidad del Zulia y la Universidad Centroccidental Lisandro Alvarado, desaparecieron de la web. Lo mismo ocurre con la página oficial del MPPEU.
Un dato curioso es que las universidades venezolanas, tanto públicas como privadas, no tienen en su URL un certificado SSL (https) que las haga ver como sitios seguros. En el monitoreo que realizó Cotejo.info a los sitios de las casas de estudio nacionales a las que se pudo ingresar se detectaron dos cosas: 1. Que el acceso a las mismas es lento. Esto puede ser por un tema de conectividad o de las plataformas donde se encuentren alojadas. 2. Ninguna parece darle importancia al plan Universidad en Casa.
En cuanto a las universidades de reconocida tendencia oficial, la Universidad Bolivariana de Venezuela sí tiene un apartado dedicado al programa, mientras que la UPTAEB, al buscarla en Google, aparece como UPTAEB Virtual – Plan Universidad en Casa, sin más.
Suministro eléctrico, una gran limitante
¿Cuáles son los escollos que debe superar Universidad en Casa para ser realmente exitoso, aparte de la gestión de información del programa en sí?
Uno de los principales problemas es el de los servicios públicos, concretamente el suministro de energía eléctrica. De acuerdo con la última medición del Observatorio Venezolano de Servicios Públicos (OVCS), realizada en junio de 2020, 54 % de los encuestados reportó tener apagones todos los días. Las ciudades más afectadas por la ausencia de electricidad a diario son San Cristóbal, Maracaibo, Barquisimeto -ciudad universitaria- y Valencia –ciudad universitaria-.
Casi un cuarto de los usuarios (24,3 %) calificó como muy mala la calidad de su servicio.
Sin internet no hay programa
Otro inconveniente es la conectividad a internet, tanto en rendimiento como en cobertura por zonas. El OVCS reveló, también en el mes de junio, que 53,1 % -más de la mitad- de los hogares venezolanos no cuenta con servicio de internet y que 51,3 % registra fallas a diario. Barcelona, Maracaibo, Caracas y Valencia tienen el porcentaje más elevado de veces que no hay conexión. 17 % afirmó que su internet es “muy malo”.
Por otra parte, es oportuno recordar que Venezuela es uno de los países con la conectividad más lenta del mundo. Cable.co.uk, compañía británica de telecomunicaciones, lleva una medición anual. Para 2019 –año con data más reciente-, Venezuela se ubicó en la posición 183 del mundo en cuanto a velocidad de conexión, con un promedio de 1,37 megabits por segundo (Mbps). Esto permitiría descargar una película de 5 gigabytes en un lapso de más de ocho horas si “no se cae” la conectividad.
Si el Estado venezolano -a través de sus empresas públicas- o el sector privado no están en capacidad de garantizar un servicio estable de luz e internet, ¿cómo pueden los estudiantes mantenerse conectados con sus profesores entregando actividades constantemente?
Accesibilidad por parte de estudiantes y profesores (a conectividad y a equipos inteligentes)
Es de conocimiento público que el salario de los profesores universitarios no alcanza para cubrir sus necesidades más básicas y con los estudiantes sucede una situación similar, muchos provienen de familias humildes que realizan grandes sacrificios para poder enviarlos a la universidad. En ambos casos, costear un teléfono inteligente, un computador moderno o tener internet constante es una quimera.
El OBU ha contextualizado este escenario con números en algunos de sus trabajos para el estado Lara. A continuación, los hallazgos más contundentes:
- 87 % de los estudiantes de las universidades públicas y 63 % de las privadas no tiene acceso a internet de forma continua
- Ocho de cada 10 estudiantes foráneos tienen dificultad para el acceso a internet desde sus casas
- Casi un tercio (32 %) no tiene acceso a una computadora para realizar sus actividades académicas. 27 % no cuenta con un teléfono inteligente
- A 70 % de los que sí tienen un smartphone se les dificulta contar con los datos móviles necesarios para cumplir con sus actividades académicas
- Un cuarto de los docentes universitarios en la entidad larense no tiene teléfonos inteligentes
- Los profesores que sí tienen un equipo móvil de generación reciente tienen serias dificultades para “estirar” los datos móviles (78 %)
- 52 % de los estudiantes ha tenido que acudir a vecinos, familiares o amigos para conectarse a internet. 58 % no tuvo acceso desde su casa a la web en 2019
- El porcentaje de docentes que nunca tuvo acceso a computadoras creció de 29 % en 2018 a 76 % en 2019.
- Uno de cada cuatro educadores consultados por el OBU no tiene posibilidad de comprar un smartphone
Tales resultados permiten concluir que, en el resto del país, tanto estudiantes como profesores atraviesan realidades similares.
Más preguntas que respuestas trae el plan Universidad en Casa
La modalidad de educación a distancia en el sector universitario del país deja sin respuesta varias interrogantes. ¿Cómo hacen los estudiantes de carreras prácticas como medicina, biología, ingenierías, entre otras, para adquirir los conocimientos que solo se obtienen en las prácticas profesionales? ¿Cómo evitarán una disminución en la calidad de los futuros profesionales?
Por todo lo anterior, los aspectos mencionados a lo largo de este trabajo referente a los servicios públicos, las precarias condiciones actuales de alumnos y docentes y, sobre todo, la escasez de información real sobre el plan Universidad en Casa -tanto del sector oficial como de las casas de estudio superior del país- desmienten al ministro de Educación Universitaria sobre el número de universidades y estudiantes que se habrían adherido a dicho programa.