- La tendencia de uso de la moneda neogranadina en 2018 era de entre el 15 y 20 por ciento. Al cierre de 2020 fue de 94 %
- Testimonios de ciudadanos y comerciantes del estado Táchira revelan que el uso del bolívar quedó prácticamente desechado
- En la región andina utilizan el peso colombiano (con dos tipos de cambio) y el dólar estadounidense. También se ha extendido el peso colombiano al resto del suroccidente venezolano
Por Yamile Jiménez
La economía de Táchira, región fronteriza ubicada al suroeste de Venezuela, siempre ha estado marcada por el movimiento comercial y la dinámica del vecino país: Colombia. De allí que en esta entidad andina la moneda dominante es el peso colombiano, a diferencia de lo que sucede en el centro del país donde el dólar americano da la pauta.
El predominio del peso en esa localidad se hizo más marcado a partir del año 2018, fecha en la que Venezuela alcanzó una cifra récord de inflación de 1.698.488 %, según los datos aportados por la Asamblea Nacional de 2015 al cierre del año. El elevado número convirtió al país en una de las tres naciones con la inflación más alta del mundo.
El descontrol económico de ese año, producto de las malas políticas en materia económica, fue noticia mundial. El diario Voz de América publicó el 9 de enero del 2019 un reportaje con declaraciones del diputado opositor Ángel Alvarado, quien advirtió que “la hiperinflación (en Venezuela) estaba lejos de terminar”.
A partir de esta dura realidad los agentes económicos del país comenzaron a proteger sus ahorros e inversiones mediante el uso de divisas, monedas que antes de 2018 eran utilizadas por sectores como el inmobiliario y venta de vehículos.
Uso del peso subió 20 % en un año
Fue en el año 2018 cuando el peso colombiano comenzó a tener una gran preponderancia en el mercado de bienes y servicios en la región, su uso dominaba entre el 15 y 20 % de las transacciones locales, según el economista tachirense Aldo Contreras, consultado por el equipo de Cotejo.info.
Contreras se ha encargado de estudiar y analizar el impacto de este fenómeno en Táchira y aseguró que en 2019 el 40 % de las transacciones ya se realizaban con la moneda neogranadina. Es decir, que el porcentaje de uso subió 20 % en un año.
El 26 de enero de 2019 el Diario La Opinión de Cúcuta publicó un trabajo donde se reflejó la manera cómo el peso colombiano ganaba terreno en San Cristóbal, capital del estado Táchira. A continuación parte del artículo:
“Aunque es común que en los negocios de Norte de Santander se comercialicen productos usando el peso colombiano o el bolívar venezolano, esto no ocurría del lado venezolano de la frontera; quizás en primer lugar porque la legislación venezolana establece como única moneda de curso legal el bolívar y en segundo término, por las fuertes restricciones que existen en ese país para la tenencia y uso de divisas. Sin embargo, desde finales de 2017 compradores y comerciantes comenzaron a hacer caso omiso de estos obstáculos y las primeras semanas de este 2018, la compra de alimentos, medicinas y artículos de toda índole usando como moneda el peso colombiano, se hace una práctica cada vez más cotidiana”.
Diario La Opinión de Cúcuta
Dos meses después -el 13 de marzo de 2019- el Diario La Nación reseñó que el peso colombiano prácticamente tenía el dominio total del movimiento comercial, en especial en las compras de alimentos en los establecimientos informales y en los mercados populares.
“El peso, moneda de Colombia, se impone en las transacciones de compra-venta en el estado Táchira. Este proceso no es nuevo en la zona andina por la cercanía con Cúcuta, capital del departamento Norte de Santander, pero ante la crisis eléctrica nacional que se registra en Venezuela y la escasez de efectivo por el poco dinero que se puede retirar de los bancos y cajeros peatonales obliga a quienes tienen esta moneda a usarla y al comerciante a recibirla
En San Cristóbal el peso se cotiza en los mercados La Ermita, Los Pequeños Comerciantes y en todos los espacios del Terminal de Pasajeros de La Concordia a 1×1, es decir, por mil pesos se reciben mil bolívares, favorable para quienes manejan la moneda colombiana”.
Diario La Opinión de Cúcuta
Ese año se agudizó la crisis eléctrica, ocurrió el apagón general, colapsaron los cajeros electrónicos y desapareció el dinero en efectivo.

Ciudadanos pasaron del malestar a la aceptación
Los comerciantes del Táchira poco a poco fueron imponiendo sus precios en pesos colombianos, de manera abierta artículos de todo tipo, pero sobre todo víveres, productos de limpieza e higiene personal eran exhibidos en las calles con sus precios en la divisa.
La situación al principio causó mucho malestar en la población, sobre todo en trabajadores públicos, amas de casa, jubilados y pensionados quienes sólo reciben bolívares y les queda cuesta arriba acceder a los pesos colombianos.
Ese año proliferaron las ventas de perros calientes y comida rápida en las calles, todos los pagos debían hacerse en pesos colombianos, mágicamente desaparecieron los puntos de ventas y sacar bolívares para pagar era casi un insulto para pequeños y grandes comerciantes.
Servicios como el pago de una doméstica, la reparación de un artefacto eléctrico, talleres mecánicos, peluquerías, entre otros, se realizaron en pesos colombianos durante 2019.
Desplazamiento del 70 % en 2020
Lo sucedido entre 2018 y 2019 hizo que, a principios del año 2020, entre el 60 y 70 % de las operaciones en Táchira se realizaran en COP o pesos colombianos.
La moneda colombiana pasó a ser parte de la cotidianidad de los tachirenses y desplazó por completo al devaluado bolívar, incluso los conductores de las unidades de transporte público comenzaron a exigir el pago en esta moneda.
La economía tachirense cada día se ha colombianizado más y traspasó la barrera de la moneda, en la actualidad más del 90 % de los productos de la cesta básica que se consumen en la entidad vienen del vecino país y pasan por trochas, evadiendo los controles sanitarios y aduaneros.
Es importante destacar que en los municipios ubicados a escasos metros de la línea limítrofe como Simón Bolívar, Ureña, García de Hevia y Junín, más del 95 % de las operaciones se realizan en pesos. En estas zonas la moneda del vecino país comenzó a circular en el año 2015 a raíz del cierre de fronteras decretado por Nicolás Maduro.
Para el cierre del año 2020, 94 % de las transacciones en el estado Táchira se realizaron en pesos colombianos y en dinero en efectivo.
“En el caso del estado Táchira más del 94 % de las transacciones se hacen pesos colombianos y hoy es común ver como absolutamente todo se paga en efectivo”, dijo Aldo Contreras, economista de la frontera, al cierre de 2020 en una entrevista para Caraota Digital.
El peso es de uso cotidiano en 2021
Durante este año 2021 se puede afirmar que todos los pagos de los tachirenses se hacen en pesos colombianos, los bolívares son cada vez más escasos y nadie los quiere. Desde el menudeo diario como la compra del pan o el pago del que cuida el carro en la calle, hasta grandes negocios se cierran en moneda neogranadina.
También se maneja el dólar estadounidense, pero el dominio del peso es más fuerte en la región fronteriza.
Asdrúbal Oliveros, director de Ecoanalítica, señaló en un reportaje publicado por Descifrado -en marzo de 2021- que “la razón del uso del peso colombiano en Táchira tiene que ver mucho con el intercambio constante de bienes y servicios con Colombia (…) hay un grupo importante que tiene cuentas financieras colombianas”.
Además, las fallas eléctricas perjudican las transacciones por puntos de venta y estimulan la circulación de monedas extranjeras en cash. Oliveros agregó también que “las ciudades donde el uso de internet es un problema se motiva el uso de divisas en efectivo”.
Los precios suben en pesos y dólares
Otra particularidad que destaca de la economía en la frontera es que los precios no se mantienen pese al uso de divisas. En Táchira es frecuente el incremento de precios de algunos rubros debido a la variación del tipo de cambio del dólar en Colombia.
El peso de la nación neogranadina se ha ido depreciando progresivamente. En el año 2018 un dólar valía en promedio 2.500 pesos por dólar, sin embargo, por distintos factores económicos, la macroeconomía colombiana y la caída de las exportaciones, la tasa representativa del mercado (TRM) subió a 3.800 pesos por dólar y a principios de este año 2021 se ubicó hasta en 4.000 pesos por dólar.
En Venezuela, los precios están establecidos por el valor del dólar, pero en el Táchira el costo de los rubros pasan del dólar a pesos, por lo que el impacto en la economía tachirense es grande, sus habitantes sufren las consecuencias de las variables macroeconómicas de Colombia.
“Constantemente en el estado Táchira los precios de los productos y servicios suben, así paguemos en pesos colombianos, pues dependemos de una moneda que no es nuestra”, aseguró el economista Aldo Contreras.
Otro de los factores que ha influido es la reconversión monetaria. En el año 2018 se suprimieron 5 ceros a la moneda, lo que causó un efecto psicológico en los ciudadanos, pues en ese momento muchos llegaron a pensar que los bolívares habían tomado fuerza, dado que por 1.000 bolívares se recibían 1.000 pesos.
En la región se manejan dos tipos de cambio: el TRM (oficial), que al 26 de julio promediaba 3.866 pesos por cada dólar, y la tasa paralela que a la misma fecha se ubicó en un promedio de 3.500 pesos por dólar. Las variaciones en este tipo de cambio inciden en la economía local.
Todo el eje andino y el suroccidente venezolano
La tendencia de uso del peso colombiano en el territorio nacional venezolano se ha extendido paulatinamente a otras regiones del país con paso firme. Además de Táchira, los demás estados del eje andino, Mérida y Trujillo, están ahora experimentando el uso recurrente de la moneda colombiana.
Igualmente ocurre más hacia el sur de esta parte de Venezuela, donde los consumidores y comercios apureños han comenzado a realizar sus transacciones en la divisa neogranadina y en la estadounidense.
“En el comercio informal de Mérida, el pago en pesos colombianos es el más común, seguido por el dólar”, dice una reseña de El Pitazo en la que además indica que lo mismo ocurre en el estado Trujillo, aunque en menor grado.
En localidades como Casigua el Cubo, el Cruce y todas las zonas del municipio Jesús María Semprún, en la parte baja del estado Zulia, casi en su totalidad se manejan con el peso colombiano, que es la moneda que circula en el Sur del Lago.