- En las últimas dos décadas Venezuela ha transitado por 9 procesos formales de diálogo dentro y fuera del país, así como con distintos veedores. La mayoría se han visto frustrados por la falta de acuerdos entre las partes, por lo que en la actualidad no existen garantías que se traduzcan en beneficios para los ciudadanos
- 6 de los 9 intentos de negociación se han desarrollado durante la gestión de Nicolás Maduro, en su mayoría con los mismos representantes en cada delegación y con peticiones similares en cada proceso
- Aunque el diálogo es una herramienta importante y válida para solventar conflictos, las discrepancias entre el sector oficial y la oposición se mantienen pese al proceso iniciado en agosto de 2021 en México (en la actualidad suspendido)
Por Mariángel Durán
El opositor Juan Guaidó reiteró durante la instalación de un nuevo período de sesiones de la Asamblea Nacional de 2015 -que lo ratificó como presidente de la directiva, el 5 de enero de 2022- que estaba dispuesto a retomar el diálogo con el gobierno de Nicolás Maduro y “retomar la posibilidad de un acuerdo integral que dé garantías, a través de la Constitución, para todos los que quieren unas elecciones libres y justas».
Según la reseña de la agencia de noticias EFE, sobre el discurso dado en un parque del este de Caracas, Guaidó afirmó que «es a través de un acuerdo, es a través de ese espacio que podemos lograr las garantías necesarias para todos los venezolanos, incluida la Fuerza Armada, el PSUV (Partido Socialista Unido de Venezuela), incluidos todos los factores hoy en Venezuela».
Con la ratificación de la junta directiva de la denominada “AN legítima”, también se prorrogó la figura de la presidencia interina hasta el 31 de diciembre de 2022, cuyo basamento legal radica, según quienes la conforman, en el Artículo 12 del Estatuto que rige la Transición a la Democracia para Restablecer la Vigencia de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, el cual establece:
“En virtud de lo establecido en el artículo anterior, la continuidad constitucional del Poder Legislativo Nacional será ejercida por la Asamblea Nacional electa el 6 de diciembre de 2015, la cual funcionará a través de la Comisión Delegada hasta por doce (12) meses continuos a partir del 4 de enero de 2022 o hasta que, dentro de ese lapso, se restablezca el orden constitucional y democrático.”
En tal sentido, Guaidó insiste en la necesidad de lograr un acuerdo para realizar elecciones libres y justas, con todas las garantías necesarias.
El equipo de Cotejo.info procedió a la verificación del discurso de Guaidó sobre el diálogo y el acuerdo como elementos esenciales para obtener garantías (de un cambio) para los venezolanos y, basado en las fuentes documentales sobre procesos anteriores, aunados a la situación política del país, estimó que la afirmación del opositor no es má que una media verdad, dado que hasta la fecha no se ha alcanzado el objetivo ni existen hasta ahora evidencias que permitan prever que en las actuales condiciones será posible.
El diálogo en Venezuela, 2 décadas de intentos
El conflicto político y social que existe en Venezuela desde principios de este Siglo XXI ha hecho que varias naciones y personalidades del mundo promuevan el establecimiento de un diálogo entre el oficialismo y la oposición. En efecto se han realizado varios encuentros, acercamientos y negociaciones, cuyos resultados no han sido los esperados para las partes involucradas y mucho menos para la población.
En la siguiente base de datos elaborada por Cotejo.info se encuentra un resumen de los procesos desarrollados durante la presidencia del fallecido Hugo Chávez y la actual gestión de Nicolás Maduro.
De las fuentes documentales consultadas destaca el proceso de diálogo establecido a finales de 2002 e impulsado por César Gaviria, expresidente de Colombia y entonces Secretario General de la Organización de Estados Americanos (OEA). Ocurrió meses después del denominado golpe de Estado y contó con la participación de voceros del sector oficial y de la Coordinadora Democrática; entre los elementos de negociación se encontraba la realización de un referendo consultivo sobre la continuidad del mandato de Chávez.
Con altibajos, las negociaciones culminaron en mayo de 2003 con un acuerdo firmado entre las partes, contentivo de 19 temas, que se pueden leer en la web de la OEA. Entre los acuerdos figuró la realización de un referendo que se concretó en el año 2004 y cuyo resultado fue la no revocación del mandato con el 59 % de los votos.
En total, durante la gestión de Chávez se realizaron 3 intentos formales de diálogo y una propuesta de parte del mandatario en el año 2011, que no fue aceptada por la oposición.
El mandato de Maduro, iniciado en 2013 en medio de unos cuestionados resultados de las elecciones presidenciales realizadas tras la muerte de Chávez, aumentó la conflictividad social durante los años consecutivos. El primero de los 6 intentos de negociación de este período se llevó a cabo en 2014; fue facilitado por los cancilleres de Colombia, Ecuador y Brasil, integrantes de la Unión de Naciones Suramericanas (UNASUR), además de la presencia de un representante del Papa.
Según el Centro de Justicia y Paz (Cepaz), las condiciones de la oposición fueron claras desde el principio: Ley de Amnistía, instauración de la Comisión de la Verdad Independiente, el compromiso para la renovación de los poderes públicos y el desarme de grupos paramilitares.
Un mes después, Ramón Guillermo Aveledo, secretario ejecutivo de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), anunció que las negociaciones se habían estancado y que el bloque opositor se retiraría como medida de protesta, en un contexto de crecientes protestas estudiantiles y represión oficial.
Dos años después, en 2016 hubo dos acercamientos, una reunión exploratoria en marzo, en República Dominicana, que no dio los resultados esperados. En octubre, tras las suspensión del referendo revocatorio, las partes se sentaron de nuevo en suelo dominicano con la presencia de un representante del Vaticano; tras el establecimiento de 3 mesas de trabajo, no hubo acuerdos, el vocero de la Santa Sede afirmó que el gobierno venezolano no había cumplido con todo lo acordado.
Al año siguiente (2017), la ola de protestas generalizadas en Venezuela impulsó un nuevo acercamiento en el mes de diciembre, en esa oportunidad impulsado por el entonces presidente de República Dominicana, Danilo Medina, y con el beneplácito de António Guterres, Secretario General de la Organización de Naciones Unidas. Después de seis rondas de negociaciones, el 7 de febrero de 2018, Medina anunció el fin del proceso por falta de acuerdo sobre la fecha de elecciones presidenciales y por la ausencia de la delegación del sector oficial.
Dos nuevos intentos se produjeron en el año 2019, el primero en mayo en Noruega y el segundo en Barbados en el mes de julio, ambos en un contexto de crisis presidencial iniciada en el mes de enero, luego de que la Asamblea Nacional de 2015 declaró a Maduro usurpador del cargo de Presidente de la República, con la consecuente creación de la figura de la Presidencia Interina a cargo de Guaidó.
Transcurrieron dos años hasta que en agosto de 2021 se inició un nuevo proceso en México que en la actualidad se encuentra suspendido y es el que Guaidó ha insistido en retomar.
En definitiva han sido 9 los intentos de diálogo en dos décadas y numerosos llamados de parte de la comunidad internacional a entablar una mediación. Casi el 67 % de estos intentos de diálogo se han dado durante la gestión de Maduro, es decir, en los 7 años transcurridos entre 2014 y 2021, con resultados poco favorables para la mayoría de los venezolanos.
La comunidad internacional ha impulsado los encuentros
Al inicio de la crisis presidencial en Venezuela fue cuando se produjo el mayor número de iniciativas de diálogo, propiciadas por la comunidad internacional, la siguiente cronología recopilada en Wikipedia se observa lo sucedido:
- 22/01/2019: México y Uruguay, hacen un llamado a la necesidad de propiciar el diálogo para reducir las tensiones y evitar una escalada de violencia.
- 24/01/2019: El secretario general de la ONU, Antonio Gutierres, hizo un llamamiento al diálogo pidiendo a todos los actores la disminución de tensiones, además de reclamar una investigación transparente e independiente de los incidentes y disturbios ocurridos el día 23.
- 28/01/2019: El Papa Francisco reitera su llamamiento al diálogo señalando de manera específica «que se realice en un clima de paz y de justicia».
- 30/01/2019: México y Uruguay anuncian la convocatoria de una conferencia internacional sobre Venezuela que se celebrará en Uruguay el 7 de febrero «para sentar las bases para establecer un nuevo mecanismo de diálogo que, con la inclusión de todas las fuerzas venezolanas coadyuve a devolver la estabilidad y la paz de este país», según el comunicado del Ministerio de Asuntos Exteriores de Uruguay. La iniciativa se plantea como respuesta al llamamiento de Gutierres y del Papa Francisco al diálogo. Bolivia se sumó a la iniciativa horas después del anuncio.
- 31/01/2019: La vicepresidenta de la Unión Europea, Federica Moguerini, anunció la creación de un «grupo de contacto por Venezuela» integrado inicialmente 8 países europeos y 4 latinoamericanos: Uruguay, Francia, Alemania, Italia, Holanda, Portugal, Reino Unido, Suecia, España, Ecuador, Costa Rica y Bolivia que mantendrán su primera reunión en Uruguay el 7 de febrero y que trabajarían durante 90 días en la posibilidad de facilitar un diálogo que culmine en elecciones con Venezuela.
La Casa Blanca rechazó, el 1º de febrero, «cualquier mediación de diálogo» que mantenga en el poder a Nicolás Maduro. Maduro mostró su acuerdo con la iniciativa de diálogo pero Guaidó rechazó esta posibilidad en varias ocasiones y con diferentes argumentos, por ejemplo, lo que declaró al diario El País de Uruguay:
“Nuestra decisión es no participar en esa iniciativa. La razón es la siguiente: las fuerzas democráticas venezolanas ya hemos participado en esfuerzos de diálogo, negociación y acuerdo en varias oportunidades con el régimen de Nicolás Maduro. Lo hemos hecho dentro y fuera de Venezuela, de manera privada, y también públicamente. Solos y con acompañamiento internacional. En la última ocasión entre los meses de diciembre 2017 y enero 2018 en la República Dominicana con el apoyo del presidente de ese país, Danilo Medina, quien se comprometió mucho en ese intento, y con la presencia de los cancilleres de México y Chile. Ellos son testigos de excepción de lo ocurrido. La consecuencia invariablemente en todos esos procesos ha sido la misma: el incremento de autoritarismo del régimen y de la represión. Al final de cada proceso de diálogo hay más presos políticos y menos derechos para los ciudadanos venezolanos. Es decir, una situación en la cual Maduro y la cúpula que lo rodea no solo no ceden nunca en nada, sino que además aprovechan esa circunstancia para blindar aún más la dictadura. Como se comprenderá nosotros no podemos prestarnos a una nueva maniobra de ese tipo”.
Pocos meses después, en julio, la presión internacional originó un cambio del discurso opositor, representantes del oficialismo y oposición se reunieron en Noruega y Barbados, pero el proceso fracasó a los 2 meses y su finalización fue anunciada en un documento firmado por Guaidó.
Dos años después, Guaidó tomó la iniciativa y expuso una ruta a la salida de la crisis denominada Acuerdo de Salvación Nacional con lo cual abogó por un nuevo proceso de diálogo que se inició en agosto de 2021, con la firma de un memorándum de entendimiento.
En septiembre, tras la segunda ronda de negociaciones, se conoció sobre un leve avance del proceso, la reseña de la agencia de noticias EFE informó sobre la firma de dos acuerdos parciales:
- Lucha unificada por la ratificación y defensa de la soberanía de Venezuela sobre la Guayana Esequiba.
- Acuerdo parcial para la protección social del pueblo venezolano (aborda la situación de los recursos congelados en el extranjero).
De acuerdo con las fuentes documentales, los desacuerdos permanecieron por lo tanto no hubo acuerdos parciales en la tercera ronda y la cuarta fue suspendida. Tras esto, Maduro declaró que no había condiciones para retomar la negociación, mientras que en diciembre la Plataforma Unitaria (un grupo de partidos de oposición) se reunió con el Departamento de Estado de EEUU e hicieron un llamado a retomar el diálogo.
Guaidó reiteró el llamado a retomar el acercamiento a principios de enero de este 2022, pero el proceso sigue paralizado. Hasta el 16 de febrero 20 países han abogado por el reinicio de las negociaciones entre el oficialismo y la oposición venezolana.
“La comunidad internacional cree que la ‘hoja de ruta’ fijada para dicho diálogo puso sobre la mesa ‘pasos importantes’ en favor del entendimiento para, llegado el caso, celebrar ‘elecciones legislativas y presidenciales creíbles, inclusivas y transparentes’. Estas deberían llegar ‘como tarde’ en el año 2024”, explica una nota periodística de Europa Press.
En ese sentido, es notable el interés externo de una negociación y solución para la situación humanitaria, política, económica y social de Venezuela, nación que también ha sido protagonista de una intensa crisis migratoria que ha causado problemas a otros países. La pregunta en esta ocasión es: ¿existe madurez suficiente entre los actores venezolanos para negociar y concretar un acuerdo?
Claves del éxito de un diálogo político
Un análisis sobre El largo camino del diálogo en Venezuela, publicado por CEPAZ en vísperas de la negociación del año 2017, indicó que “estos procesos (previos) de diálogo estuvieron signados por la imposibilidad de llegar a acuerdos impidiendo así la obtención de resultados” y la conclusión de ese momento era: “Las perspectivas de éxito no son certeras, ya que cada actor está buscando sus objetivos máximos, sin ceder en sus respectivos espacios, lo que hace muy difícil que se pueda lograr un resultado positivo para el país”.
Dicha afirmación se mantiene vigente en la actualidad, en primer lugar porque los objetivos siguen siendo los mismos para ambos bandos y en segundo lugar porque los actores son básicamente los mismos, en especial los delegados del sector oficial con Jorge Rodríguez a la cabeza.
Un documento, disponible en formato PDF, publicado en 2006 por la OEA en alianza con otras organizaciones como el PNUD, aborda las premisas necesarias para el diálogo democrático y señala como base a la comunicación, voluntad política, preservación de las estructuras jurídicas y de los procesos institucionales, flujo de información, capacitación y educación, recursos.
Además, se trata de un proceso que implica el uso de otras herramientas como la mediación, la negociación, la deliberación y la toma de decisiones, cuya duración oscila entre 40 minutos y 10 años. También es necesaria la revisión de los indicadores de madurez para el diálogo, pues de lo contrario podría fracasar, como se indica en el documento de Importancia del diálogo para la prevención de conflictos y la construcción de paz, publicado por el PNUD en 2009:
“El diálogo requiere, en primer lugar, que las condiciones básicas estén presentes. Cuando la violencia, el odio y la desconfianza son más fuertes que la voluntad de forjar un consenso, o existe un significativo desequilibrio de poder o una falta de voluntad política entre los participantes, entonces puede ser que la situación no esté lo suficientemente madura como para un diálogo. Por otra parte, los participantes deben sentirse libres de expresar sus pensamientos sin miedo a represalia o rechazo”.
Por su parte, en el manual publicado por la OEA, también incluye un listado de verificación de las situaciones en las cuales no es recomendable un proceso de diálogo, muchas de los cuales podrían aplicarse a Venezuela, por ejemplo:
- Parece haber un desequilibrio significativo de poder que inevitablemente comprometerá el diálogo, aumentando las posibilidades de que el grupo más poderoso coopte el proceso.
- La violencia, el odio y la desconfianza son más fuertes que la voluntad de hallar un terreno común.
- Los grupos o sectores clave no están organizados internamente o carecen de un sentido coherente de identidad colectiva.
Por todo lo expuesto y aunque resulta difícil predecir lo que sucederá en el corto o mediano plazo con el proceso iniciado en 2021, la afirmación de Guaidó sobre el logro de garantías para todos los venezolanos, mediante el proceso de diálogo iniciado en México, recibe el calificativo de media verdad, al tomar en consideración lo sucedido en las negociaciones previas y las discrepancias actuales que se observan en las declaraciones de las partes involucradas.